Nos costaría imaginar a Iniesta, Costa, Casillas o cualquier jugador suplente de regional preferente bostezando y arrastrándose por los pasillos del vestuario, poco antes de empezar el entrenamiento, sin que el míster tomara severamente cartas en el asunto. Imaginemos lo mismo en el hospital en el que atienden a nuestro familiar, en la cabina del avión o en el bar de la esquina. Nos quedaríamos de piedra. Pero en nuestros institutos y colegios lo dejamos pasar.

Esta es una realidad, extrapolable a nuestro centro, a nuestra clase.....a nosotros mismos. Y tal y como dice el artículo aparecido en "Ayuda al estudiante" (blog de El País que ya ha aparecido con anterioridad en nuestro blog) es un tema lo suficientemente serio como para tenerlo en cuenta, pero al que simplemente no hacemos caso.

El artículo indica que las causas de este cansancio son:

1. Nuestros estudiantes trasnochan demasiado

2. Las familias españolas suelen tener ritmos tardíos

3. Muchos estudiantes van a clase sin haber desayunado bien

4. Los estudiantes necesitan adquirir tono físico por la mañana.

5. ....... la tendencia de algunos chicos a estudiar de madrugada.

¿Y las consecuencias de esto?

1. Se pierde el tiempo y también se pierde la noción del tiempo

2. Se pierde la noción de las prioridades personales.

3. Se dificulta el aprendizaje y se empeora el rendimiento académico

El artículo en su totalidad es muy interesante y os recomiendo que lo leáis. El autor incluye dos adjuntos interesantes. Por un lado, su propuesta para un buen descanso del estudiante y, por otro, una lista de reproducción con una serie de vídeos de Mariano Fernández Enguita en la que relaciona estos temas, con la jornada escolar y el rendimiento de los estudiantes.